Desde que tengo memoria, he sentido mucha curiosidad por los idiomas. Tal vez por influencia de mi madre, que trabajó muchos años en la centralita telefónica de un hotel en el Madrid de los 70 y se carteaba con japoneses, iraníes, ingleses y mexicanos.
Para ella era una puerta abierta al mundo; su pequeño rinconcito en la entrada de aquel aparta-hotel suponía un viaje diario a diferentes culturas. yo creo que ella lo disfrutó tanto que nací con esa pasión “de serie”.
Para mí, mi pequeña ventana al mundo empezó con la música. He sido afortunada y he podido viajar más que mi madre (gracias a su sacrificio y esfuerzo), pero todo empezó con la música…
Desde pequeña he escuchado música de todas clases, de todas partes, de todo estilo. Algunos tachan mi amplitud musical de “poco criterio” o de “horterada” pero, en fin, soy como soy, me gusta lo que me gusta y no me molesta que no me entiendan. 😛
En mi casa siempre ha sonado música del país vecino norteño, la France. Los oldies franceses han sido banda sonora de tarde de juegos y cocina con mi madre. Tanto así, que a los 12, cuando tuve oportunidad, escogí Francés como segundo idioma y aunque no tuve mucha suerte con mis profesoras (bragasyaya y Concha “golf” P.) aprendí lo suficiente para hacerme entender en un campamento con el guapísimo francés de turno (no, no hubo nada, amigos para siempre… eso sí), para devorar los libros de Le petit Nicolas y para seguir investigando en su música y su cine.
Aunque he pasado muchas veces por allí, jamás he estado en su capital. De momento, me tengo que conformar con visitar la Torre Eiffel falsa de Parque Europa con el consuelo de que algún día, visitaré la Ciudad de las Luces. Para mí, la ciudad del amor es otra. 😉
Y, como siempre que hablo de música, os dejo unos cuantos links por si os apetece investigar un poquito y curiosear el mundo musical del vecino next door.
Empezando por la época de la Chanson francesa, me gustan los típicos: Charles Aznavour, Édith Piaf o Jean-Jacques Goldman.
Me divierte el folk francés: ZAZ, Yann Tiersen, Louise Attaque…
Algunas canciones de pop-rock están bien: Yelle, Camille. Lou Doillon. Charlotte Gainsbourg (hija del mítico Serge y hermanastra de Lou D.). Mozart l´opéra rock, Carla Bruni. Téte…
Montones de diferentes tipos de música electrónica: desde Air (nuestra canción, nuestro álbum), pasando por los mainstream Daft Punk o (para mí odiado) David Guetta.
Rap distinto, como el rap de Marsella.
Tienen muchos grupos de música independiente, indies franceses copiados hasta la saciedad, algunos que cantan en inglés con un gracioso acento: Melody´s Echo Chamber, You are number six (cañeros, aviso), Moodoïd…
En fin, os dejo una selección curiosa, para abrir el apetito. Y, producto nacional, no perdáis oportunidad de escuchar a esta hispano-francesa, absolutamente maravillosa musical y personalmente: Cecilia Krull.
No soy muy afrancesado musicalmente aunque hay una canción que me gusta mucho. Te la paso. Paris espectacular pero pienso que está sobrevalorado. Prefiero las ciudades con un toque más “decadente” como Lisboa tan cercana como desconocida.
Coincido contigo en varias cosas. En mi casa siempre ha habido música. Tanto por parte de mi padre como de mi hermana mayor por eso soy muy abierto de orejas aunque el rock sea la fuente de la más bebo. También me gusta viajar, pero de francés ni idea. Aquí te dejo esta canción.
Un saludo.
LikeLike
Yo escuchaba bastante en casa de mis padres a Edith, que mi hermana es fan total, pero voy a darme una vuelta musical por el resto de recomendaciones que nos haces. 😉
LikeLike
Algunas te gustarán… espero. Otras no, jajajaja. Pero bueno, está bien curiosear un poco. Gracias por estar ahí. 😉 ¡Besos!
LikeLike
Sí, seguro que está sobrevalorado… Hay tantos sitios y ciudades preciosas en el mundo… Gracias por tu regalito en forma de canción. Es muy importante ser “abierto de orejas” como dices, aunque cada uno tenga sus preferencias. 😉 Saludos!
LikeLike